Casa González es un establecimiento con una larga tradición familiar donde degustar ingredientes productos de la mejor calidad.
El restaurante Casa González se encuentra ubicado en un edificio de más de 100 años , donde además del restaurante el cliente puede encontrar un área de tienda, la barra y el salón con 15 mesas, de ambiente clásico .
El emblemático establecimiento que acoge Casa González originariamente fue una tienda de ultramarinos, que se ha sabido adaptar a los tiempos y ha complementado su actividad con la posibilidad de degustar sus productos en el salón adecuado a tal efecto.
La tradición de Casa González ha pasado de generación en generación y en este momento se encuentra dirigido por la tercera generación de sus fundadores. Tanto la historia de que hace gala como la calidad de sus productos ha convertido Casa González en uno de los mejores locales gourmet del Barrio de las Letras.
Retroceder en el tiempo. Un bar de toda la vida que conserva su esencia. Entrar en el es retroceder años en el tiempo, y sintiéndote como en casa.
Tiene embutidos de gran calidad tanto para llevar como para degustar allí.
Es un buen sitio para beber buen vino y tomarse unas tapitas mientras.
La atención de los camareros es muy buena, y saben recomendarte lo más adecuado.
Su valoración:
jml
Un bar de 1931 que ha sabido adaptarse a los nuevos tiempos. Si pasas al lado de este establecimiento, es probable que te llame la atención su antesala, perfectamente visible a través de la enorme cristalera que da a la calle. Ante nosotros tenemos lo que parece una tienda de ultramarinos, con quesos y embutidos expuestos tras una vitrina. Pero también hay mesas al estilo de un café bar. Si se te ocurre entrar, verás que a esta pequeña sala continúa un pasillo con una larga barra, y al final, un salón comedor, no demasiado grande pero lo suficiente para que no resulte agobiante. Si decides sentarte, ante tí tendrás una de las mayores cartas que hayas visto de embutidos, tostas y, sobre todo, quesos y vinos. Y a buen precio.
Casa González es un establecimiento que abrió sus puertas en 1931, y que, aunque mantiene numerosas señas de identidad de un local castizo (especialmente esa mezcla de tienda de charcutería y bar), está escrupulosamente limpio y reformado. Cuenta con socios que se benefician de descuentos, y llevan con orgullo su historia sin haberse quedado anclados en el pasado. Un sitio de lo más recomendable.